Muchas veces, asociamos la fuerza con músculos definidos o un físico que "se note". Pero la verdad es que la fuerza no siempre se refleja en lo que vemos en el espejo. Hoy, durante una revisión de metas con una amiga y clienta, me hizo un comentario que me llamó mucho la atención:
"Sí, pero a mí no se me nota la fuerza como a ti, que tienes músculos marcados."
Mi respuesta fue clara: "Eso no significa que no estás ganando fuerza."
Lo que le expliqué es algo que creo que TODOS necesitamos recordar o aprender: cada cuerpo es diferente. Yo llevo entrenando desde que era una niña, y lo que ves en mí es el resultado de años de constancia. Pero eso no hace menos valioso el progreso de alguien que apenas está comenzando o que tiene otro tipo de objetivos.
¿Cómo saber si estás ganando fuerza?
Si bien es genial ver cambios físicos, no siempre son el indicador más confiable. La fuerza se mide, no solo se ve.
Aquí te dejo algunas maneras de evaluar tu progreso:
Repeticiones y pesos: ¿Puedes hacer más repeticiones o levantar más peso que hace unos meses? Esa es una señal clara de mejora.
Ejercicios que antes eran difíciles: Tal vez antes no podías sostener una plancha por más de 10 segundos y ahora llegas a 30. Eso es fuerza.
Actividades diarias: ¿Te sientes más capaz de cargar bolsas de súper o subir escaleras sin agotarte? Tu cuerpo está más fuerte.
Menos molestias: Muchas veces, ganar fuerza también significa menos dolores en el día a día, como en la espalda o las rodillas.
Mejor postura y confianza: Incluso cosas pequeñas, como caminar erguido o sentirte estable al moverte, son señales de progreso.
No te compares, celebra tus logros
Es fácil caer en la trampa de compararte con alguien más. Pero recuerda que tu progreso es tuyo. Lo importante es que estás más fuerte hoy que ayer. A veces, esos avances no son visibles para los demás, pero se sienten en tu cuerpo, tu energía y tu confianza.
La próxima vez que sientas que "no se nota", pregúntate: ¿qué he logrado en las últimas semanas o meses? Porque créeme, esa fuerza que estás construyendo no solo importa hoy; será la base de tu salud y calidad de vida en el futuro.
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